La directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, volvió a condicionar el éxito del programa económico del organismo al resultado que obtenga el oficialismo en las elecciones del próximo domingo 26 de octubre. «El éxito va a depender de lograr que la gente acompañe», dijo Georgieva en un reportaje público en el Instituto Milken, en …
El FMI ahora exige al gobierno un buen resultado electoral para mantener la ayuda

La directora del Fondo Monetario Internacional, Kristalina Georgieva, volvió a condicionar el éxito del programa económico del organismo al resultado que obtenga el oficialismo en las elecciones del próximo domingo 26 de octubre.
«El éxito va a depender de lograr que la gente acompañe», dijo Georgieva en un reportaje público en el Instituto Milken, en una exposición en la que intentó poner a la Argentina como ejemplo de disciplina fiscal, luego del drástico ajuste en el gasto público que dispuso el gobierno de Javier Milei.
«En mi parte del mundo, en Europa Central y del Este, tuvimos ejemplos de líderes valientes que hicieron cosas muy difíciles, recortaron pensiones y salarios en un 40% o 50%, y fueron reelegidos. ¿Por qué? Porque lograron que la gente los acompañara. Existía la confianza de que eso debía hacerse», dijo la búlgara.
«Ahora miramos a Argentina, que está llevando adelante un programa de ajuste muy drástico. El éxito va a depender de lograr que la gente acompañe«, dijo Georgieva, en una inequívoca referencia a las elecciones de renovación legislativa.
Sin nombrar a la Argentina, la titular del FMI opinó que el gran desafío del organismo es «hacer que la gente entienda que un déficit en expansión y un mayor gasto público no necesariamente son buenos para ellos”. Y reconoció que “todavía no descubrimos cómo llevar a la gente con nosotros en decisiones difíciles”.
Con esas apreciaciones, formuladas apenas 18 días antes de los comicios, Georgieva volvió a rozar la intromisión en los asuntos internos del país. Algo similar había ocurrido en abril de este año, cuando instó a los argentinos a que se “mantenga el rumbo” y a “que no descarrile la voluntad de cambio”. Las fuertes críticas la obligaron a aclarar sus dichos pocos días más tarde.
Pero la advertencia también suena fuerte para el gobierno, que no atina a concretar una oferta coherente para el electorado: acaba de cambiar a su primer candidato a diputado por el distrito más populoso del país con la nómina oficializada y las boletas ya están impresas. En las últimas 96 horas, el Presidente debió acotar dos recorridas de campaña, en Santa Fe y en Mar del Plata, tras recibir repudios y cánticos en contra del público.
Milei cambia de prestamista: del FMI a Trump
En todo caso, el asunto sigue siendo un problema para el FMI, que tiene una exposición crediticia de U$S 64.000 millones con Argentina: otorgó U$S 44.000 millones para sostener al gobierno de Mauricio Macri y otros U$S 20.000 millones al de Javier Milei, de los cuales aún debe desembolsar U$S 6.000 millones. Semejante ayuda no le alcanzó al economista libertario, que ahora recurrió directamente al gobierno de los Estados Unidos.
A pesar del enérgico respaldo que hace dos semanas manifestó el secretario del Tesoro, Scott Bessent, la ayuda tarda en materalizarse. El funcionario ya se reunió con Georgieva porque quiere que el Fondo también se involucre en el (nuevo) rescate y así disminuyan las presiones internas, en un momento en que la administración estadounidense cayó en un “shutdown” federal por falta de recursos. Una de las soluciones bajo estudio es que el FMI habilite que Estados Unidos pueda ofrecer al gobierno argentino parte de los DEG que recibió del organismo en su carácter de país miembro.
Mientras Bessent y Georgieva mantienen estas discusiones, la plana mayor del equipo económico, con el ministro Luis Caputo incluido, permanece en Washington a la espera de una resolución. Los plazos se alargan y se vienen tres momentos clave para la continuación de esta historia: la reunión Trump-Milei, prevista para el martes 14; la asamblea conjunta del FMI y el Banco Mundial, que se desarrollará entre el 13 y el 18 de este mes; y los comicios del domingo 26 de octubre, donde se verá si el gobierno logra “que la gente acompañe”, como exigió Georgieva.